Si pudieras establecer el número de personas que te han dicho un Te quiero o un Te amo a lo largo de tu vida, posiblemente te recordarías de cada una de ellas, podrías cuantificar las veces e incluso revivir aquel momento especial. Y te acordarías de las personas que, aún no diciendo nada, lo gritaban en el silencio de su mente y retumbaba en cada latido? Y lo que es más importante... lo sabrías?
La semana pasada dejamos atrás San Valentín y que mejor ocasión para presentar estas 2 propuestas cinematográficas. Historias de amor visuales y artísticas, incluso transgresoras, cómicas y excéntricas. Con un nexo común, el mundo Nipón. Con una forma común, el silencio.
La primera y la más visual con una belleza en su forma y en su contenido. Con un silencio ininterrumpido, nada más que por el murmullo, la música de fondo o el transfondo de otras vidas. 3 historias entrelazadas, historias desesperadas que encuentran su belleza en el silencio. El silencio de una caricia, el de un abrazo, el de una mirada y el de un recuerdo. Dolls
es una interesante reflexión en clave japonesa sobre el amor y el
destino, sobre decisiones erróneas que marcan vidas enteras. Pero sobretodo, especial atención a la pareja de enamorados principal que en un silencio absoluto nos muestra un crisol de sentimientos que a veces no nos evitarán los escalofríos. 
La otra, más dura ( por su duración de 4 horas) y más transgresora, excéntrica y cómica es Love Exposure. Donde el silencio de una no declaración determinará toda la vida de dos jóvenes. Él, enamorado de ella desde el principio, lucha contra una fuerza extraña enmascarada en una secta; ella, sumida en el caos por traumas y falsos planteamientos llega, en el silencio de la reflexión, a la conclusión de que ha de recuperar al hombre de su vida. Todo esto envuelto en una sátira donde caben gráficos dignos de los primeros Godzillas y escenas surrealistas, cómicas y hentais. En todo caso dos ejemplos de cómo un Ai Shiteru puede hacerse más poderoso en un silencio.
*Dolls: Takeshi Kitano, 2002
*Love Exposure: Sion Sono, 2008
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